XxxHolic, Live action
Watanuki
es un estudiante de secundaria que desde pequeño tiene la maldición de poder
ver fantasmas y presencias, que intentan acercarse a él debido a su sangre. Sin
poder contárselo a nadie sufre en silencio y maldice su suerte cuando, en una
aparente casualidad tropieza con una tienda escondida, y es arrastrado hacia su
interior.
Allí
será recibido por la misteriosa Yuko Ichihara y sus dos pequeñas asistentes, quienes
le explican que el azar no existe. Si puede visualizar el anticuario es porque
tiene un deseo que desea ser cumplido. La enigmática dueña propondrá un trato
justo y favorable para los dos: concederá al protagonista el derecho a perder
la habilidad de atraer seres malditos, pero deberá trabajar, limpiar y hacer
diferentes tareas que le asigne durante el tiempo que considere necesario para
igualar semejante pacto.
Los
recados espirituales y el dueto que forma junto a su compañero de clase Doumeki
lo llevarán a presenciar misiones que irán incrementándose en peligrosidad.
Asimismo, la relación de respeto y rabia hacia éste se dará por la cercanía que
tiene con Himawari, foco amoroso del protagonista, quien también tiene un «don»
particular.
La temática es más oscura que la versión manga y la del anime, con tendencia al drama, misterio y con grandes diferencias a la obra original, pues no se puede resumir 19 tankoubons en solo 8 episodios. Historias independientes que son una probada de la trama de las CLAMP, son igualmente disfrutables sin importar si se conoce el desarrollo. Los actores hacen bien sus papeles y el toque "maduro" de la serie le hace muy bien, sin estridencias. El humor prácticamente es nulo y los fantasmas y onis no son amigables en una serie donde todo oscila en la maldad o la tragedia.
«Las casualidades no existen, solo lo inevitable»
Si
hablamos del reparto hallamos a la actriz y modelo Anne Watanabe como Yuko
Ichihara, quien tiene en su haber más de 55 trabajos entre series y películas.
Watanuki recae en Sometani Shota y Doumeki en Higashide Masahiro, conocidos por
varias obras y series en su país natal.
Los
efectos especiales y la atmósfera que rodea el templo y las casas están bien
conseguidos, así como las apariciones que van ocurriendo alrededor del
protagonista. Watanuki aprenderá que no se puede prever todo y deberá aceptar
que debe confiar en los demás, lo sobrenatural se le acercará y delegar será
imprescindible para poder afrontar los peligros que se avecinen.
El
templo donde vive Yuko y posteriormente trabajará como empleado de medio tiempo
tiene un ambiente propicio para el misterio, objetos centenarios que hacen
apariciones de acuerdo a los clientes que caigan en el lugar. Del mismo modo,
la vestimenta de cada uno de los personajes va acorde, ya que la Bruja de las
Dimensiones posee kimonos extravagantes y llamativos al igual que en el manga.
Cada
capítulo tiene su horror y deidades que requerirán la Tienda de la Maga Suprema (nunca conoceremos el nombre real, sólo
sus apodos, debido a un hechizo de autoprotección) para cumplir sus deseos,
aunque el precio siempre estipulado será acorde a la moral y las exigencias de
la dueña.
Como
adaptación va bien siempre que no intentemos comparar con el manga, esto otra
cosa y va por su camino libre. El personaje principal se siente culpable y es
más melancólico, su deseo de no volver a ver nada terrorífico o sobrenatural es
latente, aunque la sed de ayudar a los demás no cambia un ápice. La Bruja interviene en pocos casos, jugando
un papel de espectadora y enseñando los caminos, no obstante su poder es
inmenso y en ocasiones cambiará su filosofía si es por un bien mayor.
Una
de las cosas que se podría extrañar es la casi falta total de comedia, sobre
todo con la falta del «Mokona Negro» que es un elemento de mucho peso en esta
obra y el papel de unión entre otros títulos de las CLAMP, mezclando los
universos paralelos con Tsubasa
Chronicles y el mago Clow Reed, que pertenece al universo de Card Captor Sakura. Es por eso que el
rico examen psicológico de cada uno no es mencionado, lo que echa a perder
parte del encanto. Mucho del folclore nipón y chino también ha quedado relegado
al ser solo ocho los episodios, es por eso que han combinado varias historias
del papel.
No
esperen nada del otro mundo, es un live
action que reacomoda algunas piezas de la obra original, de ritmo lento no
apto para impacientes. Final bueno,
aunque la serie animada tiene más vida. ¡Nos vemos en otro número!
«¿Quieres que te conceda tu deseo?»